1. Tacto. La cama es el centro de cualquier dormitorio y las habitaciones más románticas la hacen lo más acogedora posible. Las sábanas de lujo y los cojines afelpados son maravillosos, pero la verdadera clave es un colchón cómodo, por lo que debe asegurarse de tener uno que parezca celestial y los acaricien a usted y a su pareja.
2. Vista. La luz debe ser suave y filtrada; las luces fuertes pueden restarle al ambiente. Utilice focos de bajo voltaje o aquellos de un suave tono rosa. Y, para noches especiales, nada contribuye más al romance que el cálido fulgor de las velas (asegúrese de nunca dejar de vigilar las velas).
3. Olfato. Echarle una capa ligera de aceite perfumado a los focos de luz puede hacer que se difunda un aroma calmante o sensual por todo el dormitorio. Además, rociar talco en sus sábanas puede hacerlas fragantes y sedosas. Las almohadillas perfumadas de lavanda y romero también pueden contribuir al ambiente de romance.
4. Sonido. Mantenga sus CDs favoritos a la mano; la música suave es una de las maneras más fáciles de enardecer el estado de ánimo. Si fuera de la ventana de su dormitorio hay mucho ruido, ponga cortinas gruesas para atenuar el ruido. El santuario de un dormitorio pacífico es un lugar en el que se pueden dedicar atención mutua, por lo que mantenga las distracciones como la televisión, en otra habitación.
5. Gusto. Para darse un gusto a altas horas de la noche, coloque fresas y crema en un pequeño azafate al lado de la cama. Las copas de champagne también son ideales al inicio de una noche romántica en casa.